Factores determinantes en la participación en proyectos Horizonte 2020: el caso de Uninorte y las pasantías de Columbus en Bruselas.
Reflexiones después del diálogo con Daladier Jabba y Andrea Alvarez.
Después de felicitarlos por su éxito en dos proyectos europeos, Daladier Jabba, Gestor de Recursos Internacionales de la Dirección de Investigaciones de la Universidad del Norte en Colombia, nos corrige con gran entusiasmo: “no son dos, son tres proyectos, pues recientemente hemos conseguido participar en otro sobre el Zika”. Con una tasa de éxito de más del cincuenta por ciento, Uninorte se posiciona en su país, como líder en la participación en proyectos financiados por el programa Horizonte 2020. Esto lo confirma la reciente invitación de Colciencias, responsable de ciencia, tecnología e innovación en Colombia, para compartir sus prácticas como parte de los eventos de ALCUE-NET.
Con la meta de financiar hasta 80 mil millones de euros en proyectos, Horizonte 2020, programa de la Comisión Europea para la investigación e innovación, llega al segundo año de sus siete programados. Agrupados en tres pilares, el programa contribuye a abordar los principales retos sociales, promover el liderazgo industrial en Europa y reforzar la excelencia de su base científica. Para lograrlo abre su cooperación al mundo entero.
¿Cómo logran las universidades de América Latina insertarse en este mecanismo altamente competitivo? Varios factores de éxito se evidencian en la experiencia de Uninorte. En nuestra conversación resaltan uno de ellos: la participación en el programa de pasantías en Bruselas que Columbus ofrece a sus miembros desde 2010[1] en alianza con la Consultora Moverim.
Como parte del equipo de trabajo, el representante de la universidad, accede a información de primera mano sobre oportunidades de financiamiento, networking con agencias y organismos clave, recibe coaching sobre cuestiones claves en el desarrollo de propuestas, entre otras actividades.
Andrea Alvarez, quien participó por Uninorte en 2014, subraya que haber entendido los programas y objetivos de la Comisión más allá de lo que está escrito en los papeles oficiales, comprender las reglas de juego de las convocatorias y la oportunidad de desarrollar una agenda estratégica con aliados distintos a las universidades, han sido determinantes para acceder a los proyectos.
Más allá del programa, Columbus estimula a sus miembros a planear en detalle los resultados que piensan obtener de su pasantía. Para esto, apoya al pasante para comprender la dinámica de la consecución de recursos internacionales, por ejemplo, cuando es necesario que cambien “el chip” de vender un listado de proyectos empaquetados, lo cual impide el acceso al tipo de financiamiento otorgado a través de convocatorias, con guías estrictas o a oportunidades que no pasan necesariamente por llamados públicos.
En el caso de Uninorte, el proyecto Mujeres Emprendedoras, fue financiado bajo el esquema de RISE-Marie Scklodowska Curie, que promueve el intercambio de personal de investigación e innovación. Tiene como objetivo promover el potencial de emprendimiento de las mujeres en Europa a través de la investigación sobre el tipo de competencias y formación a medida que requieren. Este proyecto, da cabida a la movilidad inter-sectorial e internacional. Una de las astucias del equipo de Uninorte fue apoyar a su investigador líder en el tema, para aprovechar sus alianzas previas con la institución coordinadora en Alemania y así participar de la concepción del proyecto y lograr una plaza como terceras partes en su implementación.
En la conversación nos hablan de la ubicación geo-estratégica de la Universidad, como punto diferenciador en las propuestas. Para sustentar la inclusión de un país tercero, los evaluadores normalmente exigen un valor agregado evidente del socio no europeo que participe de la propuesta. Esta es la razón principal para que la universidad, ubicada en Barranquilla, sea socia en el proyecto “Una arteria del imperio: Conquista, Comercio, Crisis, Cultura en el Istmo de Panamá”, que busca demostrar desde la historia, la arqueología y la arqueometría, el encuentro de los pueblos que participaron de los intercambios comerciales entre Europa, América, África y Asia, durante los siglos XVI y XVII. Sin un socio próximo a la zona de investigación, esta propuesta que cuenta con otros dos socios europeos, no tendría el mismo peso.
Aunque aún no son públicos los resultados, Uninorte accedió a un robusto proyecto para investigar el Zika, como parte de un consorcio que involucra además de Colombia, a Brasil y México por Latinoamérica. Además de su ubicación en una de las zonas donde más se han detectado casos de esta enfermedad, la Universidad cuenta con un reconocido grupo de investigadores en el área de enfermedades tropicales, en particular en el dengue y el chikungunya. La trayectoria de los investigadores, constituye uno de los puntos más valorados en la evaluación de estos proyectos y este ha sido el factor diferenciador en este caso.
Acompañar a los investigadores a enfrentar el desafío de postularse a este tipo de convocatorias, a desprenderse de la habitual forma de competir por fondos locales o nacionales, a atreverse a trabajar y cooperar en otros idiomas, son todos elementos base para romper con las dinámicas que van en contra de la participación en proyectos con equipos y fondos internacionales. Al mismo tiempo, esto no sería viable, sin una decisión institucional de priorizar la cooperación internacional, flexibilizar los procesos administrativos y destinar recursos a la preparación de su recurso humano. El caso de Uninorte confirma varios de estos factores de éxito.
Kelly Henao. Representante Latam , Columbus Association.
Columbus Association, 2016.